lunes, 18 de mayo de 2009

Taller de recambios ...

Cuando me diagnosticaron que la ELA había entrado en mi cuerpo busqué toda la información sobre ella. Cuando supe hasta donde era capaz de destruirlo, reflexioné, no contaba con ello, es degenerativa, cruel, daña al enfermo y hace sufrir a sus seres más queridos, privandonos a todos del derecho de la libertad. Durante mi vida laboral activa fuí tejiendo mi bienestar social y el de mi familia, para poder disfrutar de una jubilación digna en todos los aspectos. Lo conseguí, poder dedicarle a mi esposa el resto de todos nuestros dias juntos, aquellos dias que no pude compartir por estar ausente del hogar viendo de lejos como mis dos hijos se hacían hombres y se preparaban para enfrentarse al mundo. Estoy orgulloso de ellos, lo han conseguido, en el mundo laboral van subiendo peldaño a peldaño la competitiva escalera de la vida. Han creado su propio hogar, viven felices con sus esposas que merecen todo mi respeto y estimación. Que más puedo pedirle a la vida. Creía haberlo conseguido, pero no fué así, me había olvidado del destino. Un día apareció y me dijo: estoy aquí para fastidiarte todos tus planes, te voy a despertar de tus hermosos sueños, te presento a la ELA, es cruel, algunos de tus órganos y miembros van a sufrir un deterioro y se van a estropear. Me lo tomé con una gran serenidad, buscando alternativas contra este intruso. Se me hacía tarde, me acordé que tenía que ir al taller mecánico a cambiar una pieza del coche. Mientras conducia pense en las averias que mi deteriorado coche había sufrido. En el taller las reparaban o ponían piezas nuevas. Alguien me había comentado que en Barcelona existe una tienda de accesorios para los enfermos de ELA. Fuí a visitarla, efectivamente allí estaban las piezas de recambio para cuando las necesitase. Lo más común en los coches es el desgaste de las ruedas, para nosotros no hay recambios pero hay soluciones, para desplazarte por la casa o por la calle encontramos sillas de ruedas, unas manuales y otras a motor. Cuando ya no puedas ir en sillas de ruedas por la casa y tengas que desplazarte de la cama al baño para tu higiene, disponen de una pequeña grua con ruedas, igual que cuando tienes una avería en carretera te llevan al taller en una grua. Dejas de hablar, gran problema, te falta la comunicación. Novedad, va a salir al mercado un collar que capta las señales neurológicas enviadas a las cuerdas vocales y las sintetiza en un ordenador. Recuerdo el día que se me estropeó la bocina de mi coche y me la tuvieron que cambiar. Tus pulmones no son capaces de aspirar todo el aire que necesitas, te ahogas y ahora qué. Tambien hay solución, se llama traqueotomía, te hacen un ligero corte en la tráquea, te introducen una cánula y la conectan a una máquina de ventilación asistida. Solucionado el problema, durante el día y la noche. Que mal lo pasé aquel día que el carburador de mi coche no estaba compensado, el coche se ahogaba, le faltaba aire. Llegará un día en que no podrás masticar los alimentos, te será imposible tragarlos. Vaya problema, sino puedo llenar el estómago el cuerpo se debilitará y se morirá. Sigo buscando por la tienda y leo gastrotomía, ya lo tengo. Te inyectan una sonda en el estómago y por este conducto te alimentan. Que mal lo pasé aquel día que no pude abrir el tapón de la gasolina, cuando apenas me quedaba. Al final de la tienda, colgado en una columna veo un papel, leo: se tramitan desguaces. No me interesa, quiero pecorrer muchos kilómetros más, con tantos recambios reguro que lo voy a conseguir. Los recambios son los medios, pero hay uno que no existe, el más importante, las ganas de vivir y el amor recíproco hacía mi família y todos mis amigos. Para esto no hay piezas de recambio, no son materiales se llevan en el alma. Estoy tranquilo, hay soluciones para todo mi mal...